Historia de una Historia

Bueno a pesar de no ser la especialidad de la casa, este blog se solidariza con cualquier pedido, en este caso, fue una colega de la facultad de periodismo y comunicación social quien esbozo su voz para que sus creaciones, y vivencias sean publicadas.
Algo a priori poco usual, es cierto, ¿A quien le gusta recordar los malos momentos?, pero que se entienda bien que esa no es la idea de este posteó, es solamente para que vean como se sufre por amores en este caso, un episodio que describe como se ha jugado con los sentimientos de una persona a base de "pasarla bien", dejo de decir mis tan artimaniosas patrañas para que se adentren en estos relatos hechos por Florencia:

Es verdad que prometí no enamorarme, pero no diferencio ese sentimiento de ningún otro. Me pregunto si alguna vez te creí distinto, te creí mejor. Aunque tampoco estas tan mal, si lo que buscara fuese ser una asignatura mas en tu lista de pendientes de alguna que otra noche donde tus amigos te fallaron.

A veces no entiendo como no te cuesta reconocerte. Cuando queres algo, que en este caso pensé que buscabas afecto, y solo quisiste fingir interés por un rato, sos distinto. Cambias. Pero cuando el reloj nos vuelve a la realidad, te disfrazas de amigo, actuando y respetándome como tal, y tomándote muy a pecho ese papel

Desde mi muy inocente inocencia te pregunto, desconociendo el tema, debe ser muy lindo que los demás se enteren de tus falsas victorias, no? (y digo falsas no porque no se hagan, sino desde la falsedad sentimiento) supongo que así será, ya que pareces recurrir demasiado a esa salida, aquellas a la que no queres volver a entrar nunca mas.

Desde la comodidad, yo te venia bien. Como no es muy difícil encontrar mi punto débil, te bastaron un par de horas para jugar al regalador de amor para hacer y deshacer de mí a tu gusto, a beneficiarte conmigo de la mejor y mayor forma posible.

Me gustaría tener la certeza de si hoy puedo decirte adiós. Por las dudas de que así sea, de que todo haya quedado en un simple suspiro, quisiera aconsejarte antes de empezar a olvidarte, antes de terminar de quererte. La próxima vez que juegues con otra, así como ganaste conmigo, obvia la parte del habla. No sos malo escuchando, aunque casi tu voz no la recuerdo, como tampoco debes recordar lo que yo te dije. Y ahí esta el punto: tenes bien claras tus ideas oscuras, y creo innecesaria tu manera de querer cumplir tu objetivo.

Sos muy poco predecible, pero a la vez siento que con mirarte la mano podría describirte entero… y si te hubiera descifrado antes, con la mía te haría gestos irreproducibles en el papel. Es verdad que tal vez digo esto porque no te hallas en estas 4 paredes, porque se que no la haría si mis ojos pudiesen apenas distinguirte.

Es verdad que yo, ilusa, tal vez compre eso que nunca promocionaste. Creí llenarme con eso que no me diste, creí quererte por eso que no eras. Lo peor de todo, igual, no es el fin de este anulado comienzo, ni tus pretensiones ni el vacío contenido. Sino que vuelve a mí el sentimiento que por un rato me quitaste: empecé otra vez a sentirme sola. Y capaz que emprendió a mí ese regreso hoy, desde tu cama, desde tus brazos que abrazaban el anhelo de mi salida. Pero ahora el dolor es más cruel, lo siento todo en carne viva, en mi cuarto, en mi cama, donde quisiera que faltes tan solo por unos días, y no donde solo te recuerdo.

Es increíble, a pesar de los hechos, tu seriedad! Ya que me tomaste en broma, por lo menos, podríamos reír juntos…